lunes, 26 de abril de 2010

Martina en Candilejas.cl

Candilejas.cl, revista virtual que desconocía por completo, ha publicado hoy en su portada un artículo sobre Schmetterlinge. La nota comparte espacio con Revolución en Gaea, que Forja lanzó más o menos simultáneamente. El artículo reproduce el discurso que el escritor Darío Oses preparó para la ocasión.

domingo, 18 de abril de 2010

El Disfraz

The Rose of Versaille, by Alhambra

El barbero tira la trenza con una fuerza desproporcionada. A continuación, estira la mano libre, a tientas, en busca de las tijeras. No las encuentra; toma en cambio un cuchillo carnicero, y empieza a cortar. Mientras tanto, la niña, sentada y de manos atadas a un frío sitial, trata de comerse sus sollozos. Si no puede conservar el oro acumulado en diecisiete años, al menos intentará conservar su dignidad.

—Es un buen trabajo—dice el rapabarbas, mientras se soba las manos, complacido. Sin embargo, hay un atisbo de recelo en su semblante, como si cuestionara secretamente lo que acaba de hacer. Antes de salir, hace una torpe reverencia frente a la joven. Después, desaparece en un pasillo penumbroso. Sus pasos se pierden en la oscuridad.

La joven piensa en su cabello y en el peine de plata con el que solía cepillarlo, noche a noche junto al fuego, para que estuviera liso y resplandeciera al sol. Entonces, recuerda a su madre y a su hermano mellizo, que murió en el frente defendiendo al Rey de un destino inevitable. Lentamente, se sabe devorada por la soledad.

Sin embargo, un nuevo rumor de pasos en el corredor irrumpe en sus pensamientos. Esta vez, se trata de una pareja. Uno de ellos es el canciller. Su canciller. Puede reconocerlo por el sonido de sus botas y por el olor que desprende su ropa a lo lejos. Entonces, por un momento, imagina que puede ser salvada. Cierra los ojos, como inundando su interior con una plegaria.

El joven dignatario entra en la habitación, pero su mirada es fría. Pasa de largo. La ignora. Se sienta en un taburete, a espaldas de ella, que al instante baja la cabeza y cierra los ojos. Acto seguido, un hombre delgado y de aspecto endeble hace su entrada en el calabozo. Trae consigo una pila de prendas de vestir envueltas en seda fina. Las deposita sobre una mesa, y espera a la palabra de su amo.

—Desátala—dice éste, con una voz seca, como cuarteada. La niña escucha. En su corazón hay un chispazo de esperanza. Siente, de pronto, que tras esa mirada glacial se esconde un plan para liberarla. Espera con un esbozo de sonrisa a que el recién llegado termine su tarea. Confía en que pronto podrá ponerse de pie, y ser libre. Su cabello volverá a crecer. Es sólo cuestión de que pasen los meses.

—Quítale la ropa—ordena entonces su supuesto salvador, derrumbando sus esperanzas. Está tan pasmada que no puede ni si quiera sentirse traicionada.

Ya no hay más que esperar, salvo lo peor.

—Pero señor…

—Quítale…la ropa.

El servidor asiente. Sus manos tiemblan. —Mi pobre niña… —intenta balbucear—. Cuando llegue la hora, acuérdate de mí.

Ella asiente, con comprensión y acogimiento, a pesar de todo. Sabe que al pobre hombre nada puede reprocharle. Sólo está siguiendo órdenes.

El sastre comienza a desabrochar la telaraña de cordones que mantienen el vestido de la princesa ceñido a su breve cintura. Avanza demasiado lento para la conformidad del canciller que, sin una sola mirada a la joven, le ordena que coja las tijeras y corte. De este modo, la muchacha queda rápidamente desnuda. Aguarda de pie. Tiene mucho frío, pero no tirita. Tiene mucho miedo, pero no tiembla. Cierra los ojos y piensa en su madre cepillando su el cabello junto al fuego.

—Vístela—dice entonces el canciller, girando sobre sus talones y desplazándose en dirección al corredor—. Y no te demores —añade, al oír que en los pisos superiores se congrega una muchedumbre—. La ceremonia comenzará dentro de cinco minutos…

El modista cubre los delgados y huesudos hombros con una camisa. Luego, los rellena con motas de algodón, para darles más consistencia y una forma apropiada. Repite lo mismo en brazos y piernas. Guardar las apariencias es lo más importante. Después, echa sobre la niña una ornamentada chaqueta, una capa con joyas engastadas, y le hace ceñirse unas botas altas, para disimular la flaqueza de las piernas. Termina coronándola con una profusa melena dorada, y con una incipiente barbilla, pálida como polvo de estrellas.

—Espero que la trasformación sea de su agrado, señor —dice el alfayate, alzando un espejo, para que la joven pueda verse de nuevo, por última vez, debajo de la terrible fachada—. Que viva el Rey —añade entonces el sirviente, temblando, mientras un ruido de trompetas resuena en las alturas. El muchacho asiente con pesar, adelantándose hacia su destino. Las voces no dejan de llamar su nombre.

jueves, 15 de abril de 2010

Librerías

Hola a todos. Dejo la lista de librerías donde pueden encontrar Schmetterlinge, para todos aquellos que no pudieron ir al lanzamiento, o que fueron y no pudieron comprarlo en esa oportunidad. el precio de referencia es $8.000
  • Mago Editores
  • Nueva Altamira (drugstore, Providencia)
  • Feria Chilena del Libro
  • QuéLeo (Providencia y Vitacura)
  • Manantial
  • Antartica:
  1. Patio Centro
  2. Cerrillos
  3. Antofagasta
  4. Parque Arauco
  5. San Bernardo
  6. La Dehesa
  7. La Reina
  8. Alto Las Condes

sábado, 10 de abril de 2010

Retrospectiva

Hoy en la mañana ordené el departamento. Me levanté razonablemente temprano, pasé aspiradora, saqué el polvo, limpié el piso, lavé loza, enseres y superficies. Los días de orden y limpieza son una gran oportunidad para sentirse feliz con tu casa. También lo son para pensar un poco en uno mismo.

Han pasado casi diez años desde que me puse a escribir en serio. Mis primeros empeños los hice a poco de haber cumplido catorce, en un tiempo en que no había tantos escritores precoces como ahora. En esos días, era muy feliz haciendo lo que más me gusta, y aún lo soy. Sin embargo, a pesar del enorme logro que es Schmetterlinge, no puedo evitar sentirme un poco desencantado. Me explico.

Mientras desempolvaba los estantes de un mueble, me encontré con un disco que antes era de mis favoritos: Battalions of Fear, de Blind Guardian. Ahora bien, el cuarteto alemán fue durante siglos mi banda preferida. Compré todos sus discos,y me enojé mucho cuando no pude asistir al concierto que dieron en Chile el año 2002. Ahora, vuelvo a ellos de vez en cuando, y siempre con un poco de vergüenza, como si estuviera mal volver a aquello que nos hace algún sentido.

Entonces pensé, y me dije: esto está muy mal. No hay por qué avergonzarnos de las cosas que nos gustan, o dejar que los prejuicios de la gente ignorante nos hagan cuestionarlas.

Siento que hoy más que nunca necesito volver a mis raíces. Volver a lo que me gusta y no seguir dando botes con lo que es "correcto" que deba gustarme. Tengo ganas de revivir un poco mi viejo estilo; echo de menos esas tardes enteras de dibujo, pintar con acuarela e iniciar mangas que nunca voy a terminar. Fueron buenos tiempos, y pueden seguir siéndolo perfectamente, a pesar de que casi ha pasado una década. Pues, como dice el dicho gringo, "if it's not broken, don't fix it." No hay por qué cambiar o deshacerse de algo que todavía puede funcionar.

martes, 6 de abril de 2010

Apostillas para Schmetterlinge


A continuación, el listado completo de las referencias relevantes contenidas en Schmetterlinge. Este post no contiene spoilers, pero seguramente sea de más utilidad para los pocos mortales que ya han leído el libro y vivido para contarlo. Para los no iniciados, mejor saltárselo y volver a él más tarde.

1. El epígrafe que abre la novela es del libro La Costa Más Lejana, tercero de los libros de Terramar, de Ursula K. Le Guin.

2. El libro que Rodolfo Kemling encuentra en uno de los asientos de espera del aeropuerto John. F. Kennedy es A Wizard of Earthsea, de la misma serie y de la misma autora. El niño al que se hace referencia es de etnia yahi, sobre la base de cuya cultura Le Guin escribió los libros de Terramar.

3. Los Folios de Ellesmere, mencionados más adelante, contienen una versión ilustrada de The Canterbury Tales, de Geoffrey Chaucer. En el Códice de Nowell, también mencionado en la novela, se conserva la primera parte del manuscrito original de Béowulf. Sir Gawain and the Green Knight, de autor desconocido, es otro de las obras cumbres de la Literatura Medieval.

4. El Addison's Walk es un camino cercano al Magdalene College, en Oxford, donde J.R.R Tolkien y C.S Lewis solían pasear a menudo.

5. El pub de St. Giles al que se hace referencia no es otro que The Eagle and Child, lugar habitual de reunión para los ilustrísimos Inklings.

6. Las Hadas de Cottingley, uno de los fraudes fotográficos más controvertidos del siglo XX. Hasta Sir Arthur Conan Doyle creyó que las fotografías eran verdaderas.

7. El Título y número del tercer capítulo (Correspondencia Inesperada) es un homenaje al HP y la Piedra Filosofal , Letters from No One (Las Cartas de Nadie)

8. El Rey Brujo del que habla Sabrina Kemling no es otro que el Rey Brujo de Angmar, cabecilla de los Nueve Espectros del Anillo.

9. La leyenda escrita a los pies de la estatua del Ángel Martir en El Colegio Todos los Santos está tomada del opening de la serie de anime Elfen Lied. También es una cita bíblica.

10. Perelandra, el sobrenombre de Alejandra Arrollo, es el nombre del segundo libro de la trilogía cósmica de C.S Lewis, Perelandra: A Voyage to Venus.

11. El libro donde "todo lo que pasa por sus páginas acaba transformándose" es la Metamorfosis de Ovidio. El cuento de Píramo y Tisbe al que el narrador hace referencia es parte de esa obra.

12. El "velo de sueño que duerme a los licántropos" es la mortaja que Lúthien Tinúviel tejió de sus propios cabellos para burlar a Morgoth, según se cuenta en El Cuento de Tinúviel, de J.R Tolkien.

13. Los "cucos" a los que Martina se refiere en la aventura del paraguas, son, en efecto, una referencia a los Nueve Espectros del Anillo. Del mismo modo, puede decirse, por analogía, que la Copa de Agua es el reflejo de Barad-dûr en la mente de la pequeña, influenciada fuertemente por las lecturas de su hermana mayor.

14. La canción de Antonio Ríos que aparece en el libro es verdadera, como lo es el espacio infantil del Kiwi (Zoolo TV, para los que recuerdan esas tardes de Megavisión por allí por el año 2000).

15. El nombre de Amemizu (agua de lluvia, en japonés) es la respuesta al enigma propuesto por el mismo personaje.

16. El Golpe Maestro del Duende Leñador (The fairy-feller's master stroke) es un cuadro real, de la mano del pintor victoriano Richard Dadd. La leyenda dice que Dadd se demoró nueve años en terminarlo, tiempo que pasó encerrado en un manicomnio. También es una canción de Queen.

17. La Ofelia de Waterhouse también es un cuadro real, visión del conocido personaje de Shakespeare por el pintor británico John William Waterhouse.

18. La pila de libros que espera a Martina después de ser castigado incluye El León, La Bruja y el Ropero, de C.S Lewis, y El Hobbit, de J.R.R Tolkien. Los otros títulos como El Viento en los Sauces, las dos Alicias, son todos títulos de clásicos de la literatura "infantil".

19. "Los amigos de tras el poste de luz" y la "tierra más allá de las Sombras" hacen referencia a Las Crónicas de Narnia, particularmente al último tomo de la serie, La Última Batalla.

20. El "duendecillo comodón" aludido en el mismo párrafo no es otro que nuestro querido Bilbo Baggins.

21. Symposium, la obra citada por Rodolfo Kemling en su crítica a la alegoría, es el ampliamente conocido Banquete de Platón, diálogo en el que se tratan las distintas formas de amor del mundo clásico.

22. Faërie es el vocablo que designa el Reino de las Hadas, según el uso que Tolkien le da en su ensayo Sobre los Cuentos de Hadas.

23. Béowulf es el primer poema de la Literatura Inglesa, a pesar que su orígen es danés. La Comedia hace referencia a la obra cumbre de Dante Alighieri; Le Roman de la Rose (El Romance de la Rosa) fue una obra muy popular durante la Edad Media, cuya traducción al inglés medio se le suele atribuír a Geoffrey Chaucer.

24. La cita que abre el último capítulo está tomada de The Sandman, de Neil Gaiman, tal y como se indica en el pie de página.

25. "Yet trees are not 'trees' until so named and seen", es un verso del poema Mythopoeia, de J.R.R Tolkien.

26. El Fabricante de Lluvias es una novela de un tal Camus (no Albert Camus) que leí, más o menos, a la edad de Martina.

lunes, 5 de abril de 2010

Crónica del Lanzamiento


Unos 45 minutos antes de la hora convenida, un prolijo escritor primerizo vestido con una elegante camisa azul con rayas y un pantalón de cachemir color marengo, espera de pie junto a la salida de Metro Salvador a su amigo y compañero de letras Javier Maldonado. Alrededor de quince minutos después, el susodicho a quién se esperaba entra en escena. Luego de los respectivos saludos y preguntas de rigor, ambos se dirigen hacia las dependencias del Café Literario, cruzando un agradable y otoñal Parque Balmaceda. Por ahí cerca, dos gringos locos vestidos como montaraces predican que el Fin del Mundo viene este 2012. Portan banderas con el nombre de Dios escrito en muchos idiomas, y un folleto que reproduce las escrituras de las Tablas de la Ley. Ajenos a estos extraños portentos, los compañeros continúan su caminata. Al llegar al café, se encuentran con algunos invitados que se adelantaron y llegaron primero.

Después transcurre una media hora de presentaciones. Aparecen viejos amigos, compañeros de universidad, familiares y profesores. Entre ellos, llama la atención una hermosa señorita cuyo vestido azul le saca los ojos al ya atiborrado de nervios escritor debutante. Sin embargo, a pesar de la insuperable belleza de aquella presencia, el estómago del primerizo no puede evitar manifestar el ascenso de los nervios. Queda cada vez menos tiempo. En eso, nos informan que Jorge Baradit ya está en el recinto. Los otros presentadores aparecen casi simultáneamente. Se les pide a todos que entren, al tiempo que van llegando los rezagados. La sala del subsuelo del café literario se llena modestamente, pero se llena. Hay por lo menos cincuenta personas. Después de los últimos arreglos, se da el vamos a la ceremonia.

María Eugenia Lorenzini, editora de Forja, presenta a los encargados de dar un empujón al libro. Así, María Susana Bunster, Darío Oses y Jorge Baradit se hacen conocidos entre el público presente. Se les escucha atentamente. La profesora Bunster, fiel a su meticuloso estilo, reseña el libro apoyándose en tres o cuatro puntos principales; Baradit improvisa un comentario sobre la naturaleza de la literatura fantástica, y ameniza la jornada con una bochornosa anécdota en el baño de Starbucks que acaba con él presentando aquel libro de nombre extraño una tarde de otoño, unos seis meses después. Finaliza Darío Oses con su comentario. Afirma que Schmetterlinge es, probablemente, "la última novela de formación de la historia". Palabras demasiado grandes para quién las recibe. Después es el turno de un servidor. Logra sacar más risas de las que había esperado. Una buena improvisación en medio del plan establecido rinde buenos frutos, pero retrasa demasiado. Por esto mismo, el final de la presentación resulta algo apurado. Se olvidan agradecimientos que había que dar, y la firma de ejemplares termina siendo precisamente la vorágine atolondrada que todos querían evitar.

A pesar de eso, fue magnífico. Una gran experiencia. Para repetirla en el futuro, de todas maneras.